Tras el enfrentamiento ocurrido el pasado sábado entre los Guardianes de Cleveland y los Medias Blancas de Chicago, se espera que la liga emita un comunicado en las próximas horas. Los protagonistas de la pelea, José Ramírez, de origen dominicano, y Tim Anderson, estadounidense, se encontrarían entre los principales afectados y podrían recibir sanciones que implicarían varios juegos de suspensión.
El equipo más perjudicado sería, sin duda, el conjunto de los Guardianes, ya que se encuentran inmersos en una intensa batalla por el título divisional junto a los Mellizos de Minnesota. Perder a una de sus figuras más destacadas durante esta crucial etapa del campeonato sería un duro golpe para sus aspiraciones.
Históricamente, la Major League Baseball (MLB) ha demostrado firmeza al abordar este tipo de situaciones, aplicando medidas contundentes para salvaguardar la integridad y el espíritu deportivo del juego. Ahora, habrá que esperar el veredicto de la liga para conocer las consecuencias exactas de esta pelea.