Así se desenvolvió la jornada desafiante de Luis Arráez el martes 8 de agosto. Los Marlins de Miami por fin vislumbraron la claridad. Luego de atravesar un período de cinco derrotas en fila, el equipo con sede en Florida logró conseguir un triunfo vital para mantenerse en la pelea por el comodín, al vencer a los Rojos de Cincinnati con un marcador ajustado de 3-2.
El conjunto dirigido por Skip Schumaker encontró apoyo en una magnífica actuación del lanzador inicial Braxton Garrett, quien trabajó durante 6.0 entradas permitiendo solamente seis hits y concediendo dos carreras limpias. Esta sobresaliente presentación le otorgó el respaldo necesario por parte de su ofensiva, la cual había experimentado ciertas dificultades en los últimos encuentros.
Cabe destacar que, a pesar de recuperar el camino hacia la victoria, los Marlins de Miami no pudieron contar con la versión más destacada de Luis Arráez durante esta jornada. El jugador enfrentó dificultades ante el pitcheo de Cincinnati, que a pesar de la derrota se mantuvo constante y sólido.
En esta ocasión, Luis Arráez no logró conectar ningún imparable durante el juego, sumando así su vigésima segunda ocasión en la temporada en la que finaliza un partido sin hits. Aunque no acumuló ponches en su cuenta, el jugador no tuvo éxito en lograr conexiones sólidas con la pelota para aumentar su total de hits.
Originario de San Felipe, Arráez, quien asumió la posición de segundo bate por segunda vez en la temporada, tuvo una línea fallida hacia el jardín derecho en su primer turno al bate. Posteriormente, se encontró con dos oportunidades adicionales en las que produjo rodados hacia el cuadro, incluyendo un doble play. Finalmente, cerró su actuación con un elevado hacia los jardines, concluyendo así una jornada desafiante en términos ofensivos.
Tras su complicado desempeño ante Cincinnati, el promedio ofensivo de Luis Arráez en la temporada se situó en .370/.416/.462/.878. Aunque continúa liderando en promedio de bateo y en cantidad de hits conectados, ha descendido al cuarto puesto en términos de porcentaje de embasado. A pesar de este día desafiante, no hay razón para inquietarse.